Publicado el 23 de diciembre de 2021

Ep. 57 – CARICIAS: guía práctica para volvernos ACARICIADORES EXPERTOS (nivel 3 Super Saiyan)

En Tu perro piensa y te quiere, el libro, no este programa, decía que las caricias son una de las herramientas más poderosas de las que disponemos en ese extraño viaje relacional interespecies que hemos emprendido hace tanto tiempo con los perros.

Pero eso no hace falta decírselo a nadie que tenga perro, todos sabemos lo gratificante que es para ellos y para nosotros una buena sesión de caricias, sin embargo se conoce menos que existe evidencia científica de que las caricias sirven para gratificar a los perros, de manera que se refuercen no solo las conductas que deseamos que realicen, sino simultáneamente la relación social y la potenciación del entrenamiento como actividad social conjunta y afectiva.

Sabemos también que los perros prefieren las caricias de las personas a las conductas equivalentes de otros perros, nuestra ventaja viene de que somos una especie dotadísima para acariciar, a nivel físico y a nivel cognitivo: nuestras manos y dedos independientes nos permiten dosificar y distribuir la presión y amplitud de nuestras caricias de manera delicadísima. Mucho mejor de lo que lo consiguen los perros usando su hocico o apoyando su cuerpo en nosotros y sin comparación posible con sus contactos con las patas, muy faltos de sutileza, como todos hemos sufrido en alguna ocasión. Además nosotros podemos pensar en cuándo, cuánto y cómo debemos acariciar, ajustando las caricias a lo más conveniente para cada momento.

Sin embargo, hay perros poco aficionados a ser tocados, esto puede suplirse “estirando” un poco el concepto de caricia y asumiendo que no solo podemos acariciar de forma táctil, sino que es posible hacerlo con otra de nuestras capacidades más poderosas y, a la vez, que admite un ajuste más sútil: la voz.

Y este programa va de caricias, porque son tanto como sentimos, pero pueden ser todavía más si aprendemos cómo funcionan.