Mis amigos Aarón Sánchez y Luis Souto habían organizado un seminario interesantísimo en Zaragoza, donde ofrece sus servicios Factor Amigo, la empresa que dirige Aarón.
Traían a Kurt Kotrschal, un científico especializado en el estudio de la cognición de los lobos y los perros.
Pero pongámonos en situación Kurt Kotrschal, junto a Friedrike Range y Sofia Viranyi es fundador y director del Wolf Science Center. Para mí son el equipo más relevante del mundo en el conocimiento de la cognición comparada de lobos y perros, llevamos tiempo queriendo traer a alguno al Instituto Tecnológico EDUCAN pero no hemos encontrado fechas que nos coincidan a ambas partes.
Porque si existe algún área llena de lugares comunes en los profesionales del comportamiento canino es cuando se habla de lobos y perros, de su relación entre ellos, de sus parecidos, de sus equivalencias, de sus diferencias, de sus divergencias evolutivas y de cómo sus capacidades sociales influyen en su relación con las personas.
Las dos posturas de considerar a perros y lobos completamente iguales a nivel conductal o absolutamente diferentes son ambas profundamente equivocadas, acientíficas y únicamente basadas en prejuicios de uno u otro tipo. Esto es algo que ya mencioné en este post.
Ahora teníamos la posibilidad de que uno de las personas que más conocen en el mundo la realidad de lobos y perros, uno de los pocos científicos que los estudia de manera comparada nos limpiase de prejuicios, no sacase de los hooliganismos y los reduccionismos paletos. Comprueba en este enlace cuál es su enfoque de investigación y ¡¡flipa!!
Ahora nos iban a contar la verdad, con datos de hoy, no de hace un porrón de años, en qué se parecen y en qué se diferencian lobos y perros al relacionarse entre ellos ¡¡al relacionarse con nosotros!!
Una oportunidad que era como la posibilidad de contemplar una excepcional estatua de hielo: refrescante y transparente, pero sobre todo fugaz, pues es un equipo de investigación poco dado a salir de casa para impartir seminarios de este tipo.
Aarón y Luis lo habían logrado.
Ya comenté al impartir en Zaragoza mi seminario de diseño científico de técnicas de adiestramiento y educación canina que acudiría al seminario de Kurt Kotrschal, pese a que no tengo casi ningún fin de semana libre y pese a la envidia institucional que me daba Factor Amigo al adelantársenos en traer a uno de los más relevantes científicos en cognición comparada en cánidos. También les dije a todos los asistentes que hicieran todo lo posible por asistir, como bien recordarán.
¡¡Me encanta promocionar eventos de otras empresas en los que creo porque puedo ser mucho más entusiasta y radical que cuando es algún acto en el que EDUCAN obtendrá beneficios económicos!!
Aunque, eso sí, les he pedido que mantengan el descuento que tenemos en todas las actividades de EDUCAN para los miembros del Laboratorio de Ideas. 😉 😉
La semana pasada tuvieron una catástrofe organizativa en Zaragoza y se quedaron sin lugar para hacer el evento, así que Luis y Aarón empezaron una búsqueda de una nueva ubicación. Probablemente no lograsen después de lo sucedido ningún beneficio económico pero ¡cómo perder la ocasión!
Así que plantearon la posibilidad de hacerlo en Madrid para facilitar que acuda más gente y les ofrecí cederles nuestro centro de Brunete para realizar el evento y el apartamento que tenemos para alojar a nuestros ponentes para alojar a Kurt y a su esposa, era lo menos que podía hacer después de afirmar mi convicción de que debemos entender el mundo del perro como una empresa colaborativa y colectiva.
Además, reconozcámoslo, así lo puedo disfrutar sin viajar ni dejar de estar con mis perros 🙂 🙂
Por ello, organizado por Factor Amigo y Luis Souto, y en Madrid, Kurt Kotrschal estará en las instalaciones de EDUCAN los días 7 y 8 de Mayo, podremos compartir los conocimientos científicos más actuales, más avanzados y más ciertos sobre lobos, perros y personas. Con uno de los tres científicos de su área que considero más interesantes del mundo.
Podéis inscribiros a través del mail: formacion@factoramigo.com o del evento de Facebook.
Y si no puedes venir los organizadores han previsto la posibilidad de contratar el visionado posterior del video del seminario (¡ojo! no la asistencia en directo por streaming), si ni vienes ni contratas los video (y aunque vengas) te recomiendo leer las abundante publicaciones de este equipo increíble. Sin hacer alguna de estas cosas tus opiniones sobre las relaciones sociales de los lobos y de los perros, y sobre la trasferencia de estas a su comunicación social y afectiva con las personas serán muy parecidas a las mías sobre la selección de futbol. Y te aseguro que no querrías eso 🙁 🙁
Como EDUCAN no recibe ningún beneficio económico directo puedo ser asertivo al recomendarlo: Kurt Kotrschal (aparte de demasiadas consonantes seguidas en el apellido) tiene más de 200 publicaciones sobre este tema. Fue nombrado científico del año 2010 eme Autria y obtuvo el premio al mejor libro científico del año en 2012 ¿De verdad crees que vas a ver algún otro ponente que te aporte más en este tema? ¿De verdad crees que hay seminarios más relevantes? Yo no creo ninguna de las dos cosas y hago verdaderos esfuerzos para no alegrarme de que la mala suerte de los organizadores me permita tenerlo en casa, pedirle una entrevista y poder escucharle.
Es hora de dejar las ligerezas y las simplificaciones al hablar de perros y lobos, ya sean en uno u otro sentido, porque los adiestradores en esto a veces nos parecemos más a cuñados «enteraos» opinando en la sobremesa, con el palillo en la boca y la sonrisa de suficiencia, que profesionales cualificados.
Nada es lo que parece, nada es tan simple. Y si no me crees vente al seminario y luego me cuentas.
Muchos seminarios y ponentes son interesantes, sin embargo todos sabemos que existen ocasiones especiales en el mundo del perro.
A veces el motivo es que el ponente resulta ser excepcionalmente didáctico, generoso o sabio. Su efecto es inmediato: se nos ensancha el corazón y despierta partes dormidas de nuestro cerebro. Nos hacemos mejores.
En otras ocasiones sucede porque nos ofrece una visión global que cambia nuestra manera de entender el entrenamiento, en lugar de técnicas específicas para aplicar en momentos determinados. Cuando se da esta condición se genera una lucha revolucionaria en nuestro interior, porque empezamos a ver todo con ojos nuevos y las nuevas explicaciones compiten con las que teníamos, hasta que salimos renovados. Renacemos como entrenadores.
Estas dos condiciones se dieron en el seminario de El perro social de Juliane Kaminski.
Pero hay una tercera condición que puede hacer muy especial una ponencia, para mí la más emocionante de las tres: cuando se ofrecen conocimientos que cambian lo que sabíamos de los perros como especie, porque inevitablemente cambiarán, determinándolo, el paradigma de inferencias que usaremos para entenderles y explicar sus acciones.
Aquí el cambio es más lento. Contrariamente a las otras dos condiciones, suele suceder que no somos conscientes de cómo nos moldean estos nuevos conocimientos. Al principio muchos dicen, “esto en realidad no influye en nada de lo que hago o pienso como entrenador”, pero cuando los escuchas hablar dos años después en su lenguaje y sus referencias todo ha cambiado, sin elegirlo, sin necesidad de que el cambio sea voluntario. Como una lluvia finísima pero continua, nos moja sin ser conscientes del momento exacto en el que ha calado nuestra ropa. Como una lluvia finísima pero continua, no podemos evitar que nos empape si estamos expuestos a ella el tiempo suficiente.
Y esto es para mí lo más importante de este seminario perfecto, los novísimos conocimientos globales del perro como especie, que nos llevará a pensar en ellos de una manera diferente.
Mi amigo Luis Souto y yo coincidimos en pensar que el seminario de Juliane Kaminski El perro social que acaba de impartirse en EDUCAN probablemente sea el que aporta más datos innovadores sobre los perros de cuantos hemos visto y ella la mejor ponente de cuantas hemos escuchado. Y juntos sumamos bastante experiencia sobre el tema, además de que considero el criterio de Luis muy, muy consistente, fino y ajustado.
Es imposible explicar todos los nuevos conceptos que expuso en un artículo, así que me limitaré a exponer brevemente algunos de los más “rompedores” o sorprendentes, entendiendo por “rompedores” aquellos que aportan una manera de entender a los perros radicalmente diferente a la usual entre los entrenadores caninos.
Sobre el inicio de la domesticación
Hasta ahora pensábamos que la domesticación empezó hace unos 15.000 años, pero han surgido nuevos datos que demuestran que sucedió hace unos 30.000 años.
Esto es relevante para saber cómo se inició el proceso de domesticación, hace 15.000 años existían asentamientos humanos que podían generar desperdicios alimenticios de manera regular, siendo posible que los lobos se agrupasen en sus alrededores para aprovecharlos, iniciando así el contacto entre las dos especies. Esta hipótesis es actualmente muy popular debido a la gran difusión del libro del matrimonio Coppinger que la apoya. Sin embargo hace 30.000 años estábamos en una cultura de cazadores/recolectores, que no se asentaban de manera fija ni generaban desperdicios suficientes para que los perros se hubieran alimentado de ellos de manera continuada. Además en ese momento se cazaban grandes presas, peligrosas y difíciles de abatir, pero que proveían de una sobreabundancia inmediata de recursos perecederos. Por eso Juliane propone que la hipótesis más adecuada para explicar los primeros contactos en este nuevo marco es la caza conjunta: lobos y personas se sumaban en los episodios de caza de estas grandes presas, lo que mejoraba su efectividad, consiguiendo comida suficiente para ambas especies.
Mola, porque estos primeros contactos hubieran sido colaborativos y no únicamente parasitarios por parte de los perros. Ya lo decía Coco (a veces Barrio Sésamo sí es la mejor universidad ;-)): sólo no puedes, con amigos sí.
Además nos explicó que el número de eventos concretos de domesticación fue muy pequeño, probablemente cinco o seis únicamente. Esto también debilita la hipótesis del parasitismo como inicio del contacto, porque nos muestra que esas pocas asociaciones con los perros debieron ser muy valiosas para el hombre, nos aportaban ventajas funcionales tan importantes como para que se mantuvieran y extendieran por todo el planeta.
Selección de las razas
Sobre las razas también nos dio noticias sorprendentes, a petición de los asistentes, nombró las más cercanas al lobo de acuerdo a las pruebas de ADN (excluyendo aquellas recientes que han incorporado directamente lobos al programa de cría, como los PLCs, pero si quieres saber más sobre estos perros visita esta página). Mucha gente se sorprendió de saber que los Shar-Peis o los Chow-Chows están muchísimo más cerca del lobo que los pastores alemanes, por ejemplo.
Pero esa no era, desde luego, la información novedosa sobre las razas.
Nos contó que se ha comprobado que el crecimiento óseo está controlado por un solo gen, por eso es tan fácil seleccionar razas extremas en su tamaño (terriers de Yorkshire, dogos alemanes…) o en su aspecto (carlinos, bulldogs). Pero los tejidos blandos son genéticamente mucho más complejos y no pueden adaptarse a los rápidos cambios óseos, siendo esta la causa de muchos problemas de salud de estas razas.
Los tejidos blandos no están preparados para esas morfologías extremas, los perros minúsculos son quizá quienes más lo sufren, pero también son frecuentes en razas gigantes, padeciendo, por ejemplo, problemas de corazón por no estar preparado para bombear sangre para un cuerpo tan grande.
En los casos de perros braquicéfalos tenemos abundantes muestras: como los ojos de los pugs, que no han podido empequeñecerse y cambiar de forma lo bastante rápido como para adaptarse a las cuencas oculares que los humanos hemos seleccionado, haciendo que estén desprotegidos y tiendan a salirse. Igualmente la falta de adaptación del cerebro de los Cavalier King Charles a su cavidad craneal provoca frecuentes dolores de cabeza a esta raza (alucinad: les sucede, a un nivel más complejo, lo que decían popularmente de los Dobermann).
Por tanto la selección de razas extremas en su tamaño y/o aspecto es inevitablemente insalubre, no solo por la disfuncionalidad que pueda causar su forma (como por ejemplo no poder respirar eficazmente los bulldogs), sino por el desarreglo entre las estructuras óseas y los tejidos blandos. Creo que es necesario desde el más mínimo criterio animalista no promocionar la cría de este tipo de razas.
Jerarquía
Pues hay que mentar la bicha, porque quizá este sea uno de los puntos más sorprendentes y que más chocó con las ideas generalizadas entre muchos entrenadores.
Casi todo lo que se ha escrito sobre las relaciones de dominancia entre perros se basa en inferencias sobre otras etoespecies cercanas o en observaciones casuales de las que se ha hecho norma general. Estas vías son valiosas cuando no disponemos de otras más fiables, pero Juliane expuso un trabajo (que se ha publicado como un capítulo entero de su libro The Social Dog. Behaviour and Cognition) que duró seis años, sobre grupos de perros asilvestrados en las afueras de Roma. Es el estudio más completo y actual sobre la manera que tienen los perros de estructurar grupos y relacionarse entre sí sin intervención humana directa. Por ello es muy valioso.
En primer lugar hay que explicar brevemente que existen tres formas generales de estructurar las relaciones de dominancia/sumisión en mamíferos:
- La lineal estricta, en la que A domina a B a C y a D, B domina a C y a D y C domina a D. Esta forma de relaciones de dominancia/sumisión es la más “dura”, es la que se observó en lobos en cautividad.
- Luego tenemos las relaciones triangulares, en las que existen uno o dos dominantes (A y B), uno de los cuales domina al otro (A domina a B), y el resto de los miembros del grupo comparten el estatus C por igual. Esta es la que se suele dar en los lobos en libertad y es bastante más relajada y colaborativa que la anterior, que se veía en lobos en cautividad por el aumento de la entropía que causa el confinamiento.
- Por último tenemos las relaciones de dominancia complejas en las que A domina a B, B domina a C, pero C podría dominar a A. Esta implica una estructura casi política del grupo, puesto que alianzas y contextos pueden variar las relaciones generales, esta forma podría resultar estresante, pero más por su complejidad (es como un episodio de El ala oeste de la Casa Blanca) que por su dureza.
Se había planteado, y se había vuelto un lugar común -aunque nada lo demostrase con datos- afirmar que los perros en libertad se relacionarían y estructurarían su relación sin establecer relaciones de dominancia/sumisión. Esto era bastante irracional y anticientífico, más lógico con los datos disponibles era pensar que los perros organizarían sus grupos con formas de dominancia “suave”, debido a los factores ecológicos. Yo mismo lo pensaba y casi todos los colegas con los que he hablado del tema compartían esta idea de relaciones jerárquicas suaves.
Pues no, esta investigación ha encontrado que los grupos estudiados usan una dominancia lineal estricta, la forma más “dura” de dominancia, la de los lobos cautivos y no la más relajada de los lobos en libertad. Debo reconocer que cuando conocí este estudio en el libro de Juliane me sorprendió absolutamente. Además son menos colaborativos que los lobos en varios aspectos, como la cría cooperativa de los cachorros. Jamás hubiera anticipado este resultado. Pero el estudio es robusto y consistente.
Esto, por supuesto, se refiere a la organización de la convivencia entre perros en un entorno de libertad y no aporta ningún argumento para justificar el maltrato y el abuso al convivir con ellos en casa y entrenarlos. Lo que también se explica en el libro de Juliane y que confirmó personalmente en la entrevista que nos concedió.
De este trabajo me habéis pedido las referencias varios compañeros, Juliane ha citado varios estudios, pero os dejo el enlace hacia el artículo que constituye el capítulo tercero de su libro, que es el que tiene toda la bibliografía y las conclusiones que ella expuso.
Sobre la adopción de perros en albergues
También nos comentó uno de sus trabajos en curso, el estudio objetivo de las expresiones faciales caninas a través de FACS (Facial Action Coding System). Aunque están empezando esta línea (pero ya publicaron el año pasado sobre ella nada menos que en PLOS ONE) ya han encontrado una unidad de acción concreta muy sencilla, la AU101, que han demostrado ser característica más relevante para que un perro sea adoptado en un albergue, por delante de color, movimiento de la cola, tamaño o otros factores. Una investigación que puede tecnificar y mejorar la gestión de albergues y protectoras, además de dotarnos de herramientas neutrales para estudiar las expresiones de los perros.
Cognición física frente a cognición objetual
De lo que menos hablaré es de la parte más extensa del seminario: el estudio de las capacidades cognitivas caninas. En primer lugar porque es menos novedoso para quienes seguimos la investigación en el área, pero además requiere explicaciones más complejas y detalladas de las que puedo ofrecer en este formato, puesto que es la más “práctica”: hay que ver los diseños y los videos de los experimentos para que sea sencilla de entender y productiva.
Sí señalaré que expuso la gran capacidad social que tienen los perros para aprender y relacionarse eficazmente con las personas. En contraste está su menor capacidad cognitiva para entender y gestionar el ámbito objetual.
También insistió en la importancia de adoptar un enfoque eco-evo-devo para estudiar y entender el comportamiento de los perros, abandonando la visión «aprendizaje versus instinto», tan arraigada en algunos sectores del entrenamiento.
Al entrevistarla explicó que, sabiendo cómo es el funcionamiento cognitivo de los perros, ella se desespera mucho cuando ve como muchos entrenadores y ópticas de entrenamiento usan principalmente información y capacidades de aprendizaje relacionadas con el ámbito objetual, llegando incluso a evitar las indicaciones y comunicaciones de índole social durante los procesos de enseñanza/aprendizaje, que son las que mejor podría emplear el perro para aprender y mejorar su relación con nosotros mientras lo hace.
Juliane Kaminski acaba de pasar por el Instituto Tecnológico EDUCAN como un auténtico huracán. Y la entrevista que nos concedió va a hacer lo mismo por todo el mundo del perro.
Como le dijeron a Fry: ¡¡¡Bieeeeeenvenidos al futuro!!!
Bueno, necesitaba una broma en el título para que se me perdonen tres posts seguidos hablando de mi libro (bueno ha habido un inciso, pero también era para hablar de mis textos, así que no cuenta ;)).
Sé que empiezo a abusar de vuestra paciencia y prometo que las siguientes entradas estarán centradas en otros temas o, si se refieren al libro, contendrán “jugosos” extractos que aporten contenido técnico y no solo promocional.
De hecho empiezo a cumplir esa promesa ahora mismo: en la web de Dogalia han puesto disponible para la lectura el índice completo, mi prólogo y algunos extractos que nos han parecido interesantes a Carlos (Dangoor) y a mí. Así todo el mundo sabrá qué esperar de Tu perro piensa y te quiere. Entrenar perros no es como te lo habían contado.
Además quería contaros cómo va a ir el acto de presentación del libro, finalmente se hará en nuestro centro de formación de Madrid (por streaming directamente en tu sofá, las palomitas las pones tú), así quienes asistáis podéis traer vuestros perros. Se hará el Domingo 29 de Junio de 17´30 a 20´00 y después tendremos una pequeña fiesta.
Como explicaré de manera resumida las tesis planteadas en el texto, Dogalia ha considerado que merecéis un premio por aguantarme y por los spoilers: los asistentes presenciales recibiréis un cupón de descuento para comprar el libro en el evento por cinco euros menos que su precio de venta, los asistentes virtuales también tendrán su cupón, que supondrá que Dogalia os enviará el libro sin gastos de envío no solo a España sino a cualquier lugar del mundo. La editorial se ha tirado el rollo, reconozcámoslo.
Alguno me dirá “¡Hey! Yo ya compré el libro en la página de la editorial y pensaba asistir por streaming” ¡No podemos dejar que tu entusiasmo te cueste dinero! Si estás en el streaming y habías comprado el libro Dogalia te devolverá el importe del envío.
Para acudir, en vivo o por streaming, debes escribirnos a central@educan.es, indicando como asunto Fiesta de presentación Tu perro piensa y te quiere. Las plazas presenciales estarán limitadas, así que si quieres estar “in live” date prisa.
Ya expliqué que, para adaptarnos y aprovechar las innovaciones conceptuales del libro, cambiaremos los temario de nuestros cursos de formación de entrenadores. El primero en el que lo haremos será el Curso de Adiestrador Profesional y Técnico en Modificación de Conducta intensivo de este próximo Julio, en el que, además, impartiré personalmente los nuevos contenidos.
Esta noticia ha causado que se esté interesando mucha gente en esta edición del curso, particularmente me ha emocionado el alto número de antiguos alumnos que llevan tiempo ejerciendo exitosamente como profesionales que se han apuntado o están en proceso. También es un curso muy internacional: tenemos alumnos de Argentina, Méjico y Colombia. Por todo esto he decidido que esta convocatoria sea lo más especial posible: ¡la Edición Especial Tu perro piensa y te quiere de nuestro curso de entrenadores!
Una Edición Especial tiene que incluir contenidos adicionales que la hagan única, todo aprendiz de nerd sabe esta ley básica. En este caso serán.
- Dos talleres conmigo, fuera del horario del curso, uno para exponer y debatir sobre los puntos más interesantes del libro, que se titulará como este post: ¡Yo he venido aquí a hablar de mi libro! y otro en el que ofreceré ideas para hacer rentables profesionalmente los nuevos conocimientos: Tu cliente piensa y te contrata.
- Los asistentes a esta edición también obtendréis, además de los diplomas de asistencia y aptitud (si aprobáis), un certificado único, que no volverá a emitirse, con la leyenda: “Tu perro piensa y te quiere. Primera Promoción de Entrenadores y Técnicos del Comportamiento.”, que reproduce el dibujo de la portada del libro.
Este va a ser un verano muy, muy especial. Quienes pensamos que los perros son algo más estamos de fiesta. Para que os suméis a la celebración hemos puesto en marcha un concurso en Facebook en el que los residentes en España podéis obtener la asistencia gratuita al curso y los que estáis fuera libros autografiados y dedicados completamente gratis (incluyendo los gastos de envío a cualquier lugar del mundo).
El futuro es ahora, impresiona, pero no hay porqué ponerse nervioso O:-)
Mi nuevo libro, Tu perro piensa y te quiere, ya está colgado en Dogalia (por cierto ¡me encantan las tapas! ¿a vosotros no?) y tenía este post reservado para publicar la introducción que Josep Call ha tenido la gentileza de escribir para él. Sin embargo, tengo que hacer antes un comentario: mi amiga María me hizo saber que el día elegido para presentarlo podría coincidir con un partido España-Brasil del próximo mundial de fútbol. Como no querríamos restarle público a ese evento, hemos decidido hacerla al día siguiente: domingo 29 de Junio. La próxima semana explicaré con detalle cómo y cuándo será este acto de presentación, así como el proceso para solicitar invitaciones y los beneficios, además de pasar un buen rato entre amigos, que obtendrán los asistentes.
Y ahora vamos al turrón.
Creo firmemente que mi nuevo libro aporta novedades conceptuales de gran calado al entrenamiento canino, pero cuando Josep Call, uno de los científicos más importantes del mundo en cognición animal, se interesó en leerlo confieso que me sentí simultáneamente entusiasmado y aterrorizado. Uno está muy seguro de su trabajo hasta que una de las autoridades mundiales del tema dice que lo va a revisar, entonces la cosa cambia. Reconozco que lo releí por completo y reajuste aquellos puntos que me parecía que podían pecar de ambiguos o que podían ser explicados con más exactitud.
Tras haberlo leído se ofreció a escribir una introducción a mi texto como forma de apoyo y reconocimiento de la calidad e innovación de la propuesta. Esto me llenó de alegría, pensaba que no podía estar más feliz. Hasta que leí lo que había escrito, entonces descubrí que sí podía :). Ahora comparto con vosotros sus palabras a modo de anticipo (las negritas son mías). Y de nuevo: Gracias Josep.
Presentación de Tu perro piensa y te quiere. Entrenar perro no es como te lo habían contando, por Josep Call:
“La ciencia se nutre del cambio. Las nuevas metodologías producen nuevos resultados que a su vez requieren la formulación de nuevas teorías. El estudio científico de la conducta y del aprendizaje ha experimentado una importante doble transformación en las últimas tres décadas. En primer lugar, se ha mostrado particularmente interesado en los procesos cognitivos que sustentan la conducta, y no únicamente en la conducta. En segundo lugar, se ha interesado en el estudio del carácter concreto de cada individuo, y no únicamente en el de grupos o especies.
Este libro ha adoptado plenamente estos dos cambios fundamentales y como consecuencia permite importar los últimos avances en la ciencia básica del comportamiento al campo del entrenamiento canino. La tesis defendida en este libro representa un cambio audaz y radical en relación a los actuales regímenes de entrenamiento, a menudo únicamente preocupados en la modificación de la conducta aplicada a cualquier especie. Tres aspectos en concreto hacen que la perspectiva defendida en este libro sea especialmente única y atractiva. En primer lugar, el autor ha situado las tareas y procedimientos dentro de un marco ecológico y evolutivo adecuado. De tal modo que escapa a la simplificación excesiva de algunos etólogos que consideran a los perros como una versión ‘light’ de los lobos y de algunos psicólogos que consideran a los perros como palomas sin alas o ratas que menean la cola. Obviamente, los perros comparten ciertos rasgos conductuales y cognitivos con los lobos, las ratas y las palomas, pero los perros son algo más, como el autor argumenta de forma convincente.
Su detallado análisis de las causas subyacentes de la conducta que incluyen la cognición, la emoción y la motivación (así como sus correlatos neuronales) representan la segunda característica que hacen que la lectura de este libro sea extremadamente atractiva y fascinante. La conducta del perro se analiza desde una perspectiva multifactorial que revela un organismo complejo, intrigante y emocionante de descubrir, mucho más de lo que cabría esperar de una simple máquina de aprendizaje. En tercer lugar, el autor se toma en serio las diferencias individuales, no considerándolas una molestia que deba ser barrida debajo de la alfombra simplemente por el hecho de que no se ajusta a las recetas preestablecidas que a menudo predominan en muchas formas de entrenamiento animal. Por el contrario propone que dichas diferencias individuales son algo que el entrenador puede aprovechar para optimizar su trabajo.
En última instancia, se podría decir que un tipo de entrenamiento será juzgado por su eficacia (es decir, por su facilidad para ponerlo en práctica y mantenerlo en el tiempo sin necesidad de reentrenamiento o de programas de refuerzo constantes), no por la teoría en la que se sustente. No olvidemos que este es un libro sobre entrenamiento canino con una orientación esencialmente aplicada y los lectores pueden tener la tentación de considerar que el marco propuesto no es nada nuevo, solo una mera refundición de las técnicas antiguas adornadas por una nueva terminología. Sin embargo, creo que hacer caso omiso de los fundamentos teóricos en que se basa esta propuesta o asimilarla a otras ya existentes sería un grave error tanto para los entrenadores de perros como para sus dueños.
Desde el punto de vista del entrenador, el aprovechamiento de las predisposiciones naturales del perro, en lugar de ignorarlas o suprimirlas, así como de sus mecanismos de regulación cognitiva, pueden permitir un entrenamiento más efectivo, tanto en términos de velocidad de adquisición como en durabilidad en ausencia de refuerzo externo. Dicha optimización puede lograrse, entre otras formas descritas en el libro, mediante el entrenamiento de la motivación intrínseca que permite que el perro realice ciertas tareas sin necesidad de obtener un refuerzo externo en forma de comida. Por cierto, téngase en cuenta que la motivación intrínseca ¡también funciona muy bien con los niños! Además, el enfoque propuesto permite aprovechar los recursos cognitivos que hacen del perro un organismo flexible, permitiendo generar nuevas opciones de entrenamiento.
Desde el punto de vista del propietario, a sabiendas de que el desarrollo cognitivo también es crucial para los perros, y que el entrenamiento puede afectar sustancialmente a éste ¿no deberíamos entonces seleccionar un método que aproveche toda la gama de mecanismos cognitivos del perro y que simultáneamente tenga en cuenta su propia personalidad? Si simplemente se quiere que el perro aprenda un conjunto de rutinas fijas o trucos de circo no creo que sea necesario. Pero si se quiere dar una oportunidad al perro para que desarrolle plenamente las estrategias cognitivas que le ayudarán a hacer frente a los desafíos del día a día, y en consecuencia a mejorar su bienestar, se debería considerar muy seriamente la propuesta de este libro.”
Josep Call
Catedrático sobre los Orígenes Evolutivos de la Mente
Universidad de St Andrews.
Debido a los trabajos que muestran la capacidad del perro para aprender imitando a personas y por el salto a la palestra de algunas publicaciones científicas y propuestas de adiestramiento, se ha empezado a hablar y escribir de las neuronas espejo en los perros.
Las neuronas espejo son un tipo especial de neuronas que descubrió casualmente Giacomo Rizzolatti (junto a Leonardo Fogassi y Vittorio Gallese). Otro como Paulov, que mientras experimentaba sobre otra cosa se encontró con un Bingo científico: él originalmente estudiaba las neuronas que controlaban determinados movimientos en macacos, pero se dio cuenta de que parte de esas neuronas se activaban sin necesidad de que el mono se moviera si estaba viendo a otro mono hacer el movimiento estudiado.
Esto se debía a la existencia de un tipo de neurona desconocida hasta entonces, las neuronas espejo que se activan tanto al realizar una acción como al observar esta acción realizada por otros. Estas neuronas tienen una importante función para el aprendizaje social, facilitan entender las acciones e intenciones de los otros, también permiten el aprendizaje por imitación, por lo que su descubrimiento ha traído un vigoroso estímulo al estudio del aprendizaje social y de la metacognición. El libro «Las neuronas espejo » de Rizzolatti y Sinigaglia está traducido al castellano y publicado por Paidós.
En el mundo del perro, donde intercalamos la suspicacia y el entusiasmo hacia las novedades, se han publicado varios artículos dando por hecho la existencia de neuronas espejo en los perros.
Vayamos por partes.
Para demostrar la existencia de neuronas espejo en una especie hacen falta: la observación de la actividad cerebral a través de técnicas de observación de la actividad cerebral, principalmente la resonancia magnética funcional (también se ha usado la tomografía computerizada y el electroencefalograma) y la comprobación de la existencia de determinados comportamientos y formas de aprendizaje social, principalmente el aprendizaje por imitación.
En los perros se ha demostrado experimentalmente la capacidad de aprender imitando (Reproducing human actions and action sequences: “Do as I Do!” Topál, Byrne, Miklósi y Csanyi 2006 y después más trabajos de Miklosi y los de Tomasello y Kaminsky), desde luego los resultados permiten inferir la existencia de neuronas espejo en los perros, pero todavía nos falta cubrir el otro requisito: la observación de la actividad cerebral del perro.
Mi documentalista no había encontrado ningún trabajo que mostrase este segundo parámetro, así que escribí a varios autores que mencionaban en sus escritos la existencia de neuronas especulares en perros, además de pedir la colaboración de mis lectores en una respuesta de este blog. Debo agradecer la amabilidad de los escritores a quienes he consultado y de mis lectores al aportarme muchos datos que no conocía y que me han ayudado a entender exactamente qué sabemos sobre las neuronas espejo en perros.
Sin embargo, la mayoría de las citas consistentes eran de un mismo experimento, ya fuera directamente o a través de referencias en otros trabajos: Neural Circuits Involved in the Recognition of Actions Performed by Nonconspecifics: An fMRI Study, Buccino et Al.2004. Es cierto que en este estudio aparecen perros, monos y personas, pero si lo leemos con atención veremos que sólo se estudia la actividad cerebral de las personas, lo que se hace es ver si las neuronas espejo de las personas se activan al ver a otras especies actuar. No estudian en absoluto las respuestas de los perros ni de los monos.
No he encontrado, y estoy casi seguro de que no existe, ningún trabajo experimental que haya buscado, encontrado y registrado la actividad de neuronas espejo en perros.
Afortunadamente Juan Francisco Calle, director de la excelente web de divulgación Doogweb, ha aportado un dato muy relevante: En un su artículo del día cinco de este mes (anteayer) ¿Cómo piensan los perros? Hace referencia a que la Universidad de Emory ha sido la primera en poder iniciar estudios de neuroimagen con perros, y la Universidad de Emory lo publicó tan solo un día antes (felicidades Juan Francisco por la rapidez en trasmitirnos la “ultima hora científica”). A partir de aquí podemos hacer una ecuación sencilla, si hasta ahora no se había aplicado la resonancia magnética funcional al estudio de la actividad cerebral de los perros no podía haber registros realizados con esta prueba.
Yo tengo la convicción profunda de que los perros poseen neuronas espejo porque la evidencia comportamental demuestra la capacidad de los perros de empatizar y de aprender imitando (incluso a personas, que no son coespecíficos) y creo que es una justa aplicación de la navaja de Occam, considerar la explicación más parsimoniosa que ante el mismo tipo de aprendizaje y respuesta a una situación, en diferentes mamíferos sociales se activen mecanismos homólogos, pues el cerebro hasta ahora ha mostrado estructuras de funcionamiento similares en diferentes especies, además de tener un funcionamiento holístico que dificultaría el surgimiento y acople de estructuras análogas, no es como el pulgar del panda o las alas del murciélago.
Pero, para pisar consistentemente en nuestras afirmaciones, debemos decir que los conocimientos actuales únicamente sugieren la existencia de neuronas espejo en nuestros compañeros caninos. Esto ya es bastante milagroso como para celebrarlo, no hace falta que adelantemos acontecimientos, seguro que en unos meses los señores de la Universidad de Emory nos lo confirman ;).
Otra discusión será sobre si los perros tienen neuronas de Von Economo (estas sí se han encontrado en elefantes, ballenas y posteriormente en otros cetáceos menores como los delfines)o, a las que se les atribuye mucha importancia en la autoconciencia y el ajuste rápido a situaciones sociales con alta carga emocional. Aquí la idea generalizada es que los perros no las poseen, pero personalmente no lo veo tan claro, creo que se puede argumentar con solvencia a favor de la existencia de este tipo de neuronas en los perros. Pero esa es otra historia y debe ser contada en otra ocasión :).
En el mundo del adiestramiento algunas cuestiones suelen reaparecer cada cierto tiempo levantando opiniones entusiastas tanto a favor como en contra, una de ellas es el uso de comparaciones entre perros y lobos salvajes.
La polémica sobre perros y lobos es bastante actual en biología, voy a intentar exponer brevemente (pero no me va a salir ;)) cómo está la cosa, para que quien opine lo pueda hacer con base científica.
Hasta hace unos años el perro y el lobo eran considerados dos especies distintas desde el punto de vista de la taxonomía, la taxonomía agrupa a los animales en base a lo cercanos o lejanos que se crea que estén entre sí. La evaluación de esta cercanía evolutiva se hacía tomando en cuenta similitudes y diferencias anatómicas y morfológicas (forma y estructura, vaya). Esta manera de clasificar era un poco “a ojo” y dependía de la perspicacia del analista para interpretar lo que veía. Con este criterio se había separado a lobos y perros en dos especies diferente: canis lupus y canis familiaris.
A partir de los desarrollos en estudio del genoma cambia la manera de categorizar de la taxonomía, los estudios de ADN han tenido como consecuencia la revisión de múltiples especies, cambiando sus nombres científicos para sacarlos o meterlos en una u otra categoría. Esta revisión encontró datos concluyentes para demostrar que el perro pertenecía a la especie “lupus”, por ello las entidades de clasificación taxonómica más relevantes a nivel mundial la ITIS (Integrated Taxonomic Information System) y Mammals Species of the World actualmente clasifican al perro como canis lupus familiaris, una subespecie de lobo.
¿Esto quiere decir que la ciencia nos dice que los perros y los lobos salvajes son iguales y podemos hacer un paralelismo estricto? ¡Ni mucho menos!
La etología actual ha demostrado que la ecología determina la conducta, por ejemplo los lobos ibéricos (canis lupus signatus) se agrupan en manadas pequeñas con una pareja adulta y uno o dos añojos, siendo el máximo observado de siete individuos, lo que hace sus interacciones sociales sencillas y poco evolucionadas en comparación con, por ejemplo, los lobos árticos (canis lupus arctos) en los que se han llegado a observar manadas cercanas a la treintena de individuos, con relaciones sociales obviamente más complejas. Esto lo determina el tamaño de las presas y del territorio vital (home range).
La diferente ecología determina las técnicas de caza, en el lobo ibérico se dan el acecho o la batida según la presa, técnicas que no se dan en otras subespecies de lupus:
Texto tomado de Signatus.org:
Frente a los rebaños domésticos, los lobos suelen actual coordinadamente, poniendo en práctica la técnica del acecho. Si su labor se ve dificultada por la presencia de perros pastores, uno de los lobos se deja ver, atrayendo sobre sí la atención de los perros.
Cuando se trata de capturar conejos, uno o varios lobos actúan a manera de batidores, mientras los demás se mantienen a la expectativa, por lo regular cerca de la entrada de la conejera, adonde la presa acosada acudirá buscando refugio.
También referenciado por faunaiberica.org y animalesenextincion.es
O sea que no todos los lobos se comportan igual, pero es que –además- en los perros se ha dado un proceso de domesticación, proceso que, gracias al trabajo de Belíayev, sabemos que cambia la manera de aprender y relacionarse con el entorno.
Belíayev trabajó con zorros destinados a su explotación para la industria peletera, el planteamiento era que si se domesticaban su manejo sería más fácil y económico. Al cabo de pocas generaciones tenían animales que se dejaban manejar e interactuaban con el hombre de forma amigable, pues bien se comprobó que estos animales domesticados tenían mayor capacidad para el aprendizaje operante, mayor plasticidad social, menor rigidez instintiva y menor afrontamiento cognitivo de los problemas (Beliáyev 1969, 1979, 1981, 1982), además la historia termina bien para los zorros: la domesticación les cambiaba el color y ya no valían para piel 🙂 🙂 🙂
Estas diferencias, entorno vital y domesticación, dan como resultado que todos los autores científicos acepten hoy que lobos y perros son eto-especies diferenciadas (especies que se diferencian por su comportamiento), estas diferencias tan acusadas hacen que cada vez más etólogos planteen una nueva manera de clasificar taxonómicamente a las especies basada en trayectorias evolutivas diferenciadas, como sucede con el perro y el lobo o con las ballenas francas del Atlántico Norte y del Pacífico.
Tomando en consideración estos criterios actualmente la ICZN e ITIS admiten como válido para trabajos, comunicaciones y publicaciones científicas el termino canis familiaris como sinónimo de canis lupus familiaris.
Lo que ahora sabemos es que el perro es una subespecie de lobo por su cercanía genética pero una eto-especie diferente porque su ecología (vivir en casita tirado en el sofá y permanentemente abrazado por los más pequeños de la casa) y el proceso de domesticación han cambiado su conducta de manera relevante, poniéndolo en una trayectoria evolutiva propia y diferenciada de los demás integrantes del género lupus, con lo que es válido usar homologías con el lobo para tomar datos de apoyo pero no puede establecerse un paralelismo estricto que ignoraría sus diferencias.
Como casi siempre ni blanco, ni negro.
Enlaces a las entidades citadas:
Hay un texto en castellano que hace tiempo que estoy recomendando a quienes me escriben interesándose por los avances y nuevos enfoques de la etología.
Siempre le digo a la gente que es el libro que hoy más ofrece en un sólo texto, si sólo pudieras leer un libro y quisieras una visión muy actual y amplia esta es la elección en castellano.
Os copio el texto que le envié a un colega que me preguntó por libros de etología:
Hola Pedro
Después de Miklosi (o antes) creo que es muy interesante, «Comportamiento Animal, un enfoque evolutivo y biológico» por incluir una visión muy actual de la etología, leerlo te dará una buena impresión de lo actualizado de tus conocimientos.
Además al final de cada capítulo incluye un breve apartado titulado «cambios de perspectiva» en el que hay tres recuadros: el primero «pasado» incluye las ideas antigüas y ya superadas, el segundo «presente» lo que hoy sabemos y el tercero «futuro» los actuales interrogantes, te dejo una muestra:
Del capítulo Cognición:
- «Pasado» Los animales no pueden tener cogniciones
- «Presente» Muchos animales no humanos tienen cogniciones simples. Algunos poseen cogniciones complejas o rudimentos de estas.
Del capítulo Genes y conducta:
- ‘Pasado’ El comportamiento de los animales no humanos es mecánico o instintivo; el comportamiento humano es racional y basado en la experiencia.
- «Presente» Todo desarrollo comportamental es epigenético.
Del capítulo Aprendizaje:
- «Pasado»: La capacidad de aprendizaje de los humanos supera con creces a la de los animales no humanos (finales del siglo XIX)
- «Presente»: La mayoría de las capacidades de aprendizaje son de dominio específico. Los humanos son superiores a los demás animales en algunas capacidades de aprendizaje e inferiores en otras.
Te dejo descubrir por ti mismo el «futuro» de estos capítulos y el resto del libro.
Ed. Mc Graw Hill
Autor: Richard Maier.Un saludo.
Os dejo un enlace al libro en la tienda de Díaz de Santos:
Además es un texto muy fácil y ameno, no como los ladrillos que os puse en los enlaces 😉
Me han preguntado varios compañeros por algunos términos que estoy usando en los últimos textos que estoy publicando (epigenético, gestión del entorno…), como muchos de ellos pertenecen a la biología evolutiva del desarrollo, que es uno de los campos que actualmente más estoy estudiando y aplicando, os dejo unos enlaces en castellano sobre este área de estudio.
Os aviso que son «ladrilletes», pero creo que es bueno tener la referencia para que los más grillaos de esto se lo puedan estudiar.
- http://es.wikipedia.org/wiki/Biolog%C3%ADa_evolutiva_del_desarrollo
- http://www.encuentros.uma.es/encuentros100/evodevo.htm
- http://www.dei.uc.edu.py/tai2001/computadorasadn/comportamientos.htm
Un saludo.